Escrito por La Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) plantea un sistema de jubilación más flexible y gradual en España. De este modo, aboga por un sistema que permita combinar pensión y trabajo, adaptándose a las circunstancias personales y laborales de cada persona.
Este lunes 14 de julio de 2025, Fedea ha presentado un trabajo de investigación en el que se estima la capacidad adicional de trabajo de las personas de entre 55 y 69 años en España entre 1977 y 2018.
En concreto, los autores del estudio han utilizado la tasa de empleo como indicador de actividad y la tasa de mortalidad como aproximación al estado de salud. Una vez obtenidos los resultados, desde Fedea proponen un sistema de jubilación más flexible y gradual.
Resultados del estudio de Fedea
Según los resultados obtenidos en el estudio de Fedea, los trabajadores españoles «tienen una gran capacidad latente de trabajo en edades avanzadas que no se aprovecha».
Este trabajo de investigación determina que los hombres podrían trabajar 8 años más y las mujeres 6 años más, en comparación con finales de los años 70. Además, indican que este aumento de edad en la vida laboral activa no supondría un deterioro de su salud.
Teniendo en cuenta el periodo analizado en el estudio, los autores de Fedea establecen que la salud de las personas mayores ha mejorado de manera continuada en España durante los últimos años.
A pesar de ello, desde Fedea indican que esta mejora de salud no se ha traducido en un incremento equivalente de la participación laboral en edades avanzadas. Es más, han detectado que la tasa de empleo cae de manera abrupta a partir de los 60 años de edad en España, a pesar de que la salud se mantiene en unos niveles estables.
Por ello, los autores de este estudio de Fedea consideran que «existen barreras institucionales, laborales o culturales que limitan la continuidad laboral de las personas mayores». De este modo, solicitan cambios en el sistema de jubilación español.
Aumento de la edad de jubilación y una reforma del sistema
El estudio realizado por Fedea concluye que los hombres y mujeres mayores trabajan menos que sus homólogos en el pasado, a igualdad de estado de salud. Por tanto, plantean un sistema de pensiones más flexible y gradual en España.
Es decir, los autores de este trabajo de investigación sugieren que la prolongación voluntaria de la vida laboral debe dejar de verse como una amenaza y empezar a visualizarse como una palanca de sostenibilidad y bienestar.
Como conclusión, el estudio de Fedea recoge que «el reto es ahora diseñar políticas que favorezcan ese aprovechamiento, eliminando rigideces normativas y ofreciendo incentivos adecuados para quienes deseen seguir trabajando en edades avanzadas».
Por tanto, desde Fedea proponen al Gobierno de España avanzar hacia un sistema de jubilación más flexible y gradual para los trabajadores. En este contexto, entienden que el sistema debe permitir una combinación adecuada del cobro de la pensión y el trabajo. Todo ello, adaptado a las circunstancias de cada persona.
En definitiva, los representantes de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada determinan que en España existe un potencial laboral sin explotar en la población sénior, que podría reducir los efectos del envejecimiento de la población sobre el sistema de pensiones.