Ya hemos visto en alguna ocasión que los exoesqueletos es una solución perfecta para las personas con discapacidad física que no pueden caminar, en las que en muchos casos proviene de una lesión medular. Pero ahora, un nuevo proyecto de la Universidad del Norte de Arizona (NAU) en Estados Unidos puede tener la solución.
En este sentido, según recogen desde infosalus, se está trabajando en encontrar una solución para que las personas con discapacidad puedan caminar solas gracias a piernas robóticas con un exoesqueleto robótico de código abierto.
Un exoesqueleto que permitirá caminar a las personas con discapacidad
La revista Science Robotics ha publicado que el sistema de código abierto OpenExo proporciona instrucciones completas para construir un exoesqueleto de una o varias articulaciones,. Entre ello se encuentra archivos de diseño, código y guías paso a paso. Además, especifican que es de uso gratuito par atodos.
También explican que en la actualidad, desarrollar estos complejos sistemas electromecánicos es costoso y requiere mucho tiempo. Es por ello, que en muchas ocasiones, esto puede frenar las investigaciones antes de que comiencen.
Pero los expertos señalan que esto podría cambiar pronto. Y es que tras años de investigación en el Laboratorio de Biomecatrónica del profesor asociado de la NAU, Zach Lerner, han dado lugar al primer marco integral de código abierto para exoesqueletos, que está disponible para cualquier persona en todo el mundo. Debemos de tener en cuenta que exoesqueleto eficaz debe ser biomecánicamente beneficioso para quien lo lleva. Por lo tanto, su desarrollo requiere un amplio proceso de ensayo y error, así como su adaptación a casos de uso específicos.
«Los exoesqueletos transformaban la capacidad»
Lerner ha señalado que su proyecto «es importante para la comunidad investigadora porque reduce significativamente las barreras de entrada». Además, recoge que «en un momento de disminución de las subvenciones federales, los sistemas de código abierto como OpenExo cobran cada vez mayor importancia para facilitar la investigación de vanguardia en rehabilitación asistida por robots y aumento de la movilidad».
No es la primera vez que el equipo de Zach Lerner se involucra en este tipo de investigaciones. Y es que ya ha ayudado a niños con parálisis cerebral a seguir el ritmo de sus amigos y a pacientes con trastornos de la marcha y discapacidad a optimizar su rehabilitación. Por ello, esta investigación ha generado millones de dólares en subvenciones y ha impulsado una empresa derivada que ha comercializado un dispositivo robótico para el tobillo.
Lerner señalaba que «los exoesqueletos transformaban la capacidad. No hay nada más gratificante que trabajar en una tecnología que pueda tener un impacto positivo inmediato en la vida de alguien».